martes, 8 de diciembre de 2015

Por qué agitamos el vino al catarlo



¿Por qué nuestro amigo enólogo agita la copa cuando cata un vino? 



Existe todo un ritual a la hora de catar un vino. En la fase olfativa de la cata se hace una primera olfacción a copa parada y otra en movimiento.



Nuestro olfato a la hora de catar se ve influido por factores como el tamaño y forma de la copa, lo que acabamos de olerla temperatura. No se debe olvidar que la primera impresión es muy importante, ya que nuestro olfato se adapta en un principio a lo que huele, perdiendo sensibilidad y como consecuencia cuesta más percibir esos aromas.


Cada tipo de molécula de olor tiene diferente volatilidad, es decir, tienen diferente capacidad para salir del vino y evaporarse, llegando hasta nuestras fosas nasales. Las moléculas más ligeras o volátiles salen del vino con mayor facilidad, de ahí que se deba hacer una primera olfacción a copa parada, evitando la rápida disipación de estas moléculas. Las moléculas más pesadas necesitan ser ayudadas por el movimiento que se hace en las copas de vino al agitar el mismo. El vino recorrerá las paredes de la copa en forma de lámina muy fina arrastrando las moléculas más pesadas y aumentando la capacidad de evaporación de las mismas. De este modo se podrán percibir las notas aromáticas que aportan estas moléculas.

Sin este movimiento muchos aromas no serían percibidos a la hora de degustar un vino en toda su amplitud.


1 Comentarios:

Anónimo dijo...

BUEN ARTICULO